Ayer me apetecía preparar un pollo relleno, pero quería algo distinto y además quería ceñirme a lo que tenía en la despensa. Pensé y pensé y esto es lo que salió. A pesar de que nos gustaba más el relleno que el mismo pollo, sólo dejamos los huesos. Y palabras de mi marido, "la salsa es adictiva". Fotos hay las justas, y la verdad no son muy lucidas, pero si os fiáis de mi, preparad este plato, no os defraudará.
Las cantidades que os voy a indicar, no son exactas porque lo iba poniendo todo un poco a ojo, pero más o menos son esas.
INGREDIENTES:
- 1 pollo limpio
- 125 gr de queso tipo Philadelphia
- Un puñado de pasas
- 45 g de cacahuetes
- 4 lonchas de bacon
- 100 ml de vermut rojo, coñac o whisky
- 1/2 l. de caldo de pollo
- Sal y pimienta
- Patatas para la guarnición
- SALSA:
- 6 zanahorias
- 50 gr de mantequilla
- 2 cucharadas de azúcar
- 45 gr de cacahuetes
- El caldo de la cocción del pollo
PREPARACIÓN:
Empezamos preparando el relleno o farsa. Para ello mezclamos en un bol el queso con las pasas, los cacahuetes y el bacon cortado a tiritas.
Salpimentamos el pollo por dentro y lo rellenamos con la mezcla anterior. Después cosemos la abertura del pollo para que no se salga dicha mezcla.
Lo regamos con el vermut y lo introducimos en el horno que habremos precalentado a 200º.
Más o menos, a la media hora, el vermut se habrá consumido casi todo, sacamos del horno y le añadimos las patatas cortadas a trozos y regamos todo ello con el caldo. Volvemos a introducir en el horno.
De vez en cuando regamos el pollo con el caldo y una hora más tarde, le damos la vuelta.
Cuando ya esté dorado por ese lado, sacamos el caldo que utilizaremos para la salsa.
A mi me gusta terminar el pollo con el horno en la posición con ventilador, para que quede más crujiente.
Mientras el pollo se está horneando empezaremos a preparar la salsa. Pelamos y cortamos las zanahorias a rodajas finas. Derretimos en una sartén la mantequilla, a fuego medio para que no se queme, y echamos las zanahorias. Rehogamos hasta que estén blanditas.
En ese momento añadimos el azúcar, removemos y dejamos que se caramelicen.
Trituramos junto con los cacahuetes y el caldo de cocción del pollo. Servimos en una salsera. La salsa es un perfecto acompañamiento tanto para el pollo, como para las patatas.
Ese plato tiene muy poca salsa. Os aseguro que, cuando la probéis, os serviréis mucha más.
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