New York cheesecake

Versiones de tartas de queso existen muchas, de hecho, yo ya tengo tres en el blog, "la tarta de queso y melocotón", "la tarta de queso y granada" y la "tarta de queso con dos chocolates". Pero esta receta es la de la tarta de queso por excelencia, la tarta de queso tipo americana, más conocida como New York cheesecake. Está compuesta por una base crujiente de galletas, una gruesa capa de crema de queso y una cobertura de mermelada, preferiblemente de algún fruto del bosque o una mezcla de ellos, todo ello en perfecta armonía.

INGREDIENTES:
BASE:
- 300 gr de galletas tipo Digestive o María
- 60 gr de mantequilla
- 50 gr de almendras picadas
RELLENO:
- 6 huevos
- 200 gr de leche condensada
- 400 gr de nata
- Una cucharadita de azúcar vainillado
- 600 gr de queso tipo Philadelphia
COBERTURA:
- Mermelada o confitura de frutos del bosque


PREPARACIÓN:
Empezamos preparando la base. Para ello pulverizamos las galletas, bien en el Thermomix 5 sg a vel. 7-9 o con un rodillo. Fundimos la mantequilla en el microondas y la añadimos a la masa de galletas junto con las almendras. Mezclamos bien y depositamos esta masa en el interior de un molde desmontable. Aplastamos muy bien hasta cubrir toda la base y paredes(hasta dónde podáis) del molde.

Metemos en el congelador para que se endurezca.
Como la cocción de esta tarta será al baño María, antes de empezar a elaborar el relleno, pondremos agua en la bandeja del horno hasta media altura y conectaremos el horno a 180º para que se vaya calentando el agua.
Echamos los huevos en el vaso del Thermomix y batimos 30 sg a vel.5 (podéis hacerlo con batidora).
Añadimos la leche condensada, la nata, el azúcar vainillado y el queso, y batimos 30 sg a vel.5.
Sacamos el molde del congelador y forramos con papel de aluminio muy bien, sobre todo la base, para que no pueda entrar el agua.
Vertemos la mezcla de queso sobre la base de galletas.

LLevamos el molde al horno, con mucho cuidado no nos quememos con el agua caliente. Horneamos durante 45-60 min. hasta que el palillo salga limpio.

Dejamos que se enfríe sobre una rejilla y después la guardamos en la nevera, hasta el día siguiente o un mínimo de 8 horas.
Antes de servir, desmoldamos con cuidado y cubrimos la superficie con la mermelada elegida.

Una tarta de sencilla elaboración con la que triunfaréis.
Fuente: Velocidad cuchara